Monday, September 04, 2006

Japón 2006


Estaba claro que, tarde o temprano, estos chicos harían algo grande. Eliminado Mario Pesquera, sustituido por el gran Pepu, y recuperado Pau, los últimos obstáculos habían desaparecido.
Además, cuando me enteré de que en su tiempo libre jugaban a La Pocha, supe también de la existencia del nivel de inteligencia coherente que en otras selecciones o deportes es difícil encontrar (ya he hablado de ello alguna vez) y que no sobra a la hora de ganar.
Este gran deporte, La Pocha, ha sido maltratado durante tres décadas por madres, novias y deficientes varios que lo calificaron de obsesión, adicción, perversión o pérdida de tiempo y será ahora que somos campeones del Mundo cuando se le de el trato que merece.
Tres en un gran día: Baloncesto, Pocha y Estudiantes