Saturday, November 25, 2006

Víctimas

Hay que reconocer que cuando alguien decide llamarse víctima a sí mismo razones debe tener. El ser humano tiende a levantarse, verbal o mentalmente, frente a la humillación establecida en la que suele vivir; sin embargo, nos encontramos con los que hacen profesión del hecho de haber sido tocados, aunque sea de refilón, por algún tipo de acontecimiento negativo si la responsabilidad del mismo está asumida por administración, institución, organismo o empresa.
Las del terrorismo vasco son, a mi parecer, verdaderas víctimas: de los asesinos etarras; del tiempo, que siempre azota sus convocatorias; de su presidente, verdaderamente impresentable, que debe presidirlos por haber sido el primero que se presentó para representarlos; y, sobre todo, de sus sentimientos humanos, dirigidos por una necesidad de venganza imposible de saciar en este sistema- Estado de Derecho- que siempre llevan en la boca…Y ahí precisamente está el problema: ni toman las decisiones, ni deben hacerlo y, gracias a Dios, no pueden hacerlo.
Ya que tan asumido tienen el papel, deberían tener cuidado de no alimentar nuevos conflictos de los que puedan surgir más afiliados para su club.