Friday, December 07, 2007

Altas metas

El señor Navarro -¡cuánto tiempo!, ¿qué te has hecho en el pelo?- tiene un problema con la estadística: debe aportar resultados de su gestión sin dejar de causar la alarma en que la basa. Acabo de verlo en la televisión y en esas estaba: orgulloso de enseñar algo a unos suecos que nos han visitado asombrados ante la evolución de nuestras cifras, inasumibles para Pere, por otro lado.
Los responsables de la Solución Final, dedicados en cuerpo y alma a incrementar el rendimiento de los sistemas industriales de eliminación de hebreos, debían liquidar y liquidaron a muchos, pero nunca presumieron de haber llegado a la excelencia.
Lo que deben aprender los suecos -todos debemos aprenderlo- es que, para alcanzar grandes metas, hay que apuntar a metas grandísimas, y no conformarse con mediocridades.
Pere y Heinrich: dos perfeccionistas.