Ayer se jugaron los dos primeros partidos de los cuartos de final del Eurobasket. En el primero de ellos se enfrentaban Francia y Rusia. En el segundo, España y Alemania.
El resultado fue contundente, todos pudimos oírlo: España perdió contra los tres. De forma aplastante contra Francia y Rusia, por mucho contra Alemania.
El himno de España -la Marcha Granadera o Marcha Real- es feo de narices. Da la sensación de que podría tocarse sólo con platillos. Además, es largo y con amagos. Cuando la gente empieza a respirar porque la cosa parece acabarse, le dan otra vuelta, y aún más fuerte.
El reto de ponerle una letra oficial -ya ha tenido varias oficiosas- aparece y desaparece como las noticias de verano. Ni sé quién puede tener interés en cantar cuando suena esa pieza, ni creo que sirviera más que para empeorarlo. Recomiendo, ya que no podemos adoptar la Marsellesa, dejarlo como está y utilizar siempre la versión corta.